La Crisis de los Contenedores es el nombre que se ha dado al fenómeno de alta demanda y baja oferta de contenedores a nivel mundial. Este fenómeno afecta a las industrias logísticas, exportadores e importadores, así como al consumidor final y las economías globales. Descubre de qué se trata, sus causas y sus repercusiones, tanto actuales como futuras.
Desde el inicio de la pandemia desencadenada por el COVID-19 en 2020, la economía mundial se ha mantenido en un estado de incertidumbre y ha creado problemas logísticos que afectarán a la economía por varios años. Desde principios del 2021, la cadena de suministros ha visto una reducción en su capacidad que la ha limitado para responder a una creciente demanda. Esta desproporción en oferta y demanda ha provocado un aumento significativo en el costo de los fletes que, a su vez, ha impactado negativamente las exportaciones e importaciones a nivel mundial. Los precios de contenedores han aumentado de $ 2,174 USD a $10,996 USD en tan solo un año, y no se ve una solución en el futuro cercano.
Comparativo de los precios de transporte de contenedores entre el año 2020 y el 2021.
Fuente: FBX Freightos
Esta situación tiene sus orígenes en la baja disponibilidad de contenedores causada por las rigurosas medidas preventivas ante la COVID-19 en algunas regiones; estas han limitado el funcionamiento normal de embarcaciones, puertos y bodegas en algunos países de Europa y América que se han visto imposibilitados de cargar algunos contenedores con mercancías para su regreso a Asía. Pero esto no acaba aquí, factores naturales también juegan un papel importante; la temporada de tifones ha impedido el flujo normal de las embarcaciones marítimas. Además, algunos puertos se encuentran cerrados y/o con funcionamiento limitado debido a las restricciones ante la pandemia, por eso, se han creado congestiones en algunas vías.
A pesar de la creciente necesidad de reactivación económica y del consumo durante el 2021, la bautizada “crisis de contenedores” podría desatar una cadena de caídas económicas. Los comerciantes pequeños se verían obligados a cerrar sus negocios ante la imposibilidad o dificultad de adquirir recursos o mercancías; las grandes empresas absorberían el aumento en sus costos, y lo reflejarían en el aumento de precios y posibles despidos; y para los consumidores traería escasez de los productos que requieren, pues “el 80% de los bienes que se consumen son transportados por vía marítima”. Este panorama también se complica ante los ya existentes pero imprevistos riesgos que podría enfrentar una carga durante su transporte. Sea por vía marítima, terrestre o aérea, las mercancías siguen estando en riesgo ante diversos factores; su posible pérdida o deterioro podrían dar como resultado sobrecostos adicionales, subiendo aún más los precios y afectando el resto de la cadena logística.
La situación no termina en el 2021, pues se proyecta que se extienda hasta mediados de 2022, año en el que posiblemente los precios llegarán a nuevos máximos para la industria.
En aras de este contexto y la alta probabilidad de que la crisis tenga una prolongación, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), tras analizar los diversos factores que influyen en la situación, establecieron 3 estimaciones esenciales para que los responsables políticos ayuden a prevenir que la crisis se repita:
Fuentes:
BBC Mundo: https://www.bbc.com/mundo/noticias-58558860
https://www.clubdecarga.com